December 18, 2024
La ganadería Borda Matías, en Biescas, Huesca, ha importado los primeros yaks domésticos de España desde Francia. Ricardo Azón y Rosa Avellanet, responsables de la iniciativa, recibieron dos hembras y un macho jóvenes sin parentesco para iniciar la cría de esta especie en el Pirineo. Estos animales, conocidos por su carácter sociable y curioso, se han adaptado bien al entorno.
Los yaks, que parecen vacas peludas, poseen características distintivas como la cola similar a la de un caballo y una joroba prominente. Pesan entre 300 kilos las hembras y 500-600 kilos los machos. El macho importado tiene un peculiar tono plateado, aunque los colores más comunes son oscuros, grises, marrones y pintos.
La idea de traer yaks surge tras contactos con criadores franceses que llevan una década trabajando con estos animales en el Macizo Central. Los yaks son resistentes, requieren manejo extensivo y aprovechan bien los recursos naturales. Su cría busca promover productos como carne y lana, destacando su carne roja, baja en grasa y colesterol, con un ligero sabor a caza, ideal para guisos y embutidos.
La lana del yak, especialmente su pelo interior, es fina, cálida y ligera, siendo muy apreciada en la moda. Ricardo y Rosa esperan que esta especie prospere en el Pirineo y se consolide como una alternativa sostenible y de calidad.